Rezos para menores de 13 años

El Sidur es un libro muy especial que contiene todas las oraciones que nosotros los judíos rezamos cada día. 

Es como una guía que nos enseña qué palabras decir cuando hablamos con Dios. En el Sidur, encontramos oraciones para la mañana y la noche. También tiene oraciones para ocasiones especiales, como el Shabat o las fiestas.

Es un libro que nos ayuda a sentirnos más cerca de Dios, y cuando rezamos, sabemos que estamos haciendo algo que muchas personas han hecho por mucho tiempo. En ésta sección podrás leer las oraciones que los niños deben hacer todos los días.

Gracias Dios mío porque desperté sano y feliz.
Amén.

Gracias Dios mío porque estoy vivo.

Gracias por la ropa que tengo.

Gracias por la comida que nos das todos los días.

Gracias porque soy muy feliz.

Gracias por mamá y por papá.

Gracias por mis hermanitos.
Amén.

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¡Escucha Israel! Elyon nuestro Dios, es un solo Dios.
Amén.

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Todo el tiempo pienso en ti, Dios mio.

Cuídame y guíame siempre.  

Ayúdame a cumplir con la Torah.

No permitas que cometa demasiados errores.

Ayúdame a hacer siempre caso a mis papás y a llevarme bien con mis hermanitos, amiguitos y vecinos.

Ayúdame a nunca decir mentiras.

Ayúdame a ser buen niño (a) Dios mío.

Amén.

¡Escucha Israel! Elyon nuestro Dios, es un solo Dios.
Amén.

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Ayúdame Dios mío para que siempre pueda aprender sobre tus mandamientos.

Sigue dando vida a mi familia y a mi.

Todo lo que prometes, lo cumples.

Protéjenos para que nadie nos haga daño.

Haz milagros y guíanos siempre.

Cuídanos de las cosas malas.

Ayúdanos a descansar está noche Dios mío.
Amén.

Dios mío, ayúdame a dormir con tranquilidad.

Hazme descansar y despertar saludable mañana.

Amén.

Había una vez en una pequeña ciudad un grupo de niños que querían aprender a orar. 

Ellos sabían que sus padres rezaban con un libro especial, pero no entendían bien cómo usarlo. Un día, su maestro les presentó un libro muy especial llamado Sidur.

El maestro les explicó que el Sidur es como una guía mágica que nos ayuda a hablar con Dios. 

Dentro de este libro, hay oraciones que la gente ha rezado durante miles de años, desde los tiempos antiguos hasta hoy. 

El Sidur tiene oraciones para cuando nos despertamos, antes de dormir, cuando estamos agradecidos y hasta cuando necesitamos ayuda.

Un niño llamado Daniel preguntó: "¿Cómo sabe Dios que estamos orando si leemos las palabras del libro?"

El maestro sonrió y le respondió: "Dios no solo escucha las palabras, también siente lo que hay en tu corazón. 

Cuando rezamos con el Sidur, estamos uniéndonos a muchas personas que también están hablando con Él."

Luego, la maestra les mostró una oración muy especial llamada "Shema". 

"Es una de las oraciones más importantes del Sidur," explicó. "En ella, decimos que Dios es uno y que siempre debemos amarlo con todo nuestro corazón."

Los niños comenzaron a practicar leyendo las oraciones del Sidur. Al principio, les parecía difícil, pero con el tiempo, las palabras se volvieron familiares y sentían que estaban más cerca de Dios.

Cada vez que alguien se sentía triste o asustado, abrían su Sidur y encontraban una oración que les daba paz y esperanza. 

Si estaban felices o agradecidos, también encontraban oraciones para esos momentos.

Un día, una niña llamada Sara dijo: "Me gusta mucho usar el Sidur, porque cuando rezo, siento que no estoy sola. 

Es como si Dios estuviera a mi lado, escuchando mis palabras y cuidándome."

Y así fue como los niños aprendieron que el Sidur es más que un libro. 

Es un amigo que les ayuda a acercarse a Dios y a sentirse amados y escuchados.

Desde entonces, los niños de la ciudad siempre llevan su Sidur con ellos, sabiendo que cada palabra, cada oración, los conecta con Dios y con su historia. 

Y cada vez que abren su Sidur, sienten que están en una conversación especial con Dios, que siempre está allí para escucharles.

Fin

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Este cuento ayuda a los niños a entender la importancia del Sidur como una herramienta para la oración y su conexión con Dios.

(Rabina Naomi Saraí)